Gestionar los Riesgos Psicosociales: Más que una obligación, una oportunidad

En el año 2007, cuando comencé a adentrarme en el ámbito de la salud organizacional y los riesgos psicosociales, la idea de que las organizaciones pudieran preocuparse seriamente por la salud mental de sus empleados sonaba a una visión futurista. En aquel entonces, no existían leyes ni marcos regulatorios que abordaran directamente este tema, mucho menos que lo integraran de manera concreta en las políticas laborales.

Recuerdo cómo las empresas reaccionaban a la noción de abordar los riesgos psicosociales en el lugar de trabajo. Sus respuestas iban desde la genuina curiosidad hasta la incredulidad. "Suena interesante, pero ¿realmente es necesario ahora?", decían algunos líderes. "Quizás en el futuro, cuando estemos más avanzados", anticipaban otros con un tono que sugería que esta perspectiva estaba muy lejos de ser una prioridad en ese momento.

Sin embargo, el tiempo ha demostrado que lo que una vez se consideró una idea lejana ahora es una necesidad urgente y apremiante. La evidencia científica ha dejado en claro que la salud mental precaria de los empleados no solo afecta el rendimiento y la productividad. A su vez, ha demostrado que las condiciones laborales tienen un impacto significativo en el bienestar social, la presencia de enferemedades, en las expectativas de vida de las personas, en las tasas de mortalidad y en los costos de del sistema de salud, entre otras consecuencias. Las personas no solo quieren, sino que necesitan sentirse respaldadas, valoradas y cuidadas en sus entornos laborales.

La evolución hacia una gestión integral de riesgos psicosociales es el resultado de una acumulación de conocimiento y experiencia a lo largo de los años. Ahora, más que nunca, se reconoce que abordar estos riesgos no es un lujo que solo algunas organizaciones pueden permitirse, sino una necesidad que todas deben enfrentar. Esta comprensión ha sido respaldada por cambios en las leyes laborales que reconocen la importancia de la salud mental en el lugar de trabajo y establecen pautas claras para su manejo. Sin embargo, no podemos quedarnos ahí. Hay un nivel de profundidad más allá de las regulaciones donde se encuentra el verdadero desafío y la oportunidad.

Este "doble click", como me gusta llamarlo, es lo que nos permite entender los factores internos y específicos de cada organización que generan estos riesgos. Es aquí donde entra en juego la capacidad de personalizar las soluciones, de identificar los desencadenantes únicos y de diseñar intervenciones que no solo cumplan con la ley, sino que también impulsen un cambio positivo real en la cultura organizacional.

Hoy, la gestión de riesgos psicosociales no solo es una respuesta a una obligación legal, sino una necesidad vital que trasciende el rendimiento financiero. Es un compromiso con el bienestar humano y la construcción de un entorno laboral que no solo sobreviva, sino que también prospere en un mundo en constante cambio. Como se dice (atribuyéndole a Darwin), "no es el más rápido, ni el más fuerte, ni el más veloz, el que sobrevive, sino el que mejor se adapta a las circunstancias".

Un cordial saludo,

Matías Velasco G.

Psicólogo Clínico

Consultor en Salud Mental & Organizacional

Riesgos psicosociales